Ana Frank

“Otto Sobrevive” Historias de resistencia que guían a la juventud en nuestros días

…Nadie entendía cómo lo logró, así que lo compartió: más de la mitad de las veces que logró escaparse fue gracias a soldados nazis que le advirtieron a tiempo que tenía que irse. Acá está el dinamismo en los roles, la complejidad de la que tanto hablamos, así como la esperanza que tanto reivindicamos sin caer en una visión naif.…”

Me invitaron a escribir. Me gustaría decir que lo hago con frecuencia pero lamentablemente no es así. 

Me dijeron que escriba sobre mi experiencia, que en estos tiempos de tanta desazón, quizás tenía algunas reflexiones interesantes para aportar. Me convencieron. Creo que son tiempos de encontrarnos, aunque sea con un papel -o una pantalla- para pensar, para parar, para (re)conectar. Para intentar elaborar un presente que se presenta como eterno y avasallante.

Rápidamente me gustaría dejar claro desde dónde soy convocada. Trabajo en el Centro de Ana Frank Argentina. A partir de aquí podría simplemente dedicarme a escribir sin parar, explayarme eternamente sobre qué significa eso, por qué es un centro, cómo está compuesto, cómo se trabaja en el museo, bajo qué premisas, con qué herramientas, en qué contenidos, para lograr qué objetivos, etc. Probablemente no pueda desarrollar todo pero intentaré ir brindando algunas pistas que nos ayuden a vislumbrar cómo nuestra propuesta busca erigirse como un horizonte posible para la acción y la reflexión.

En el museo de Ana Frank trabajamos sobre tres ejes fundamentales:

La historia de Ana Frank en relación con el contexto.

Proponemos el diálogo entre la historia singular de Ana y los datos contextuales que permiten reconstruir los procesos históricos que se gestaron y perpetraron en esa época.

A la hora de pensar en la historia de Ana Frank y el contexto en el que transcurre, claramente empezamos a encontrarnos esos vínculos ineludibles entre historia y memoria que tanto desarrollo teórico suscitaron y suscitan. En nuestro museo, al igual que en muchos otros, vamos a seguir encontrándonos con la idea del “nunca más” o “para que no se vuelva a repetir” pero en ningún momento se piensa en estas premisas en abstracto, están siempre ancladas a la realidad, ancladas a lo tangible, a la idea de que tenemos la posibilidad de intervenir activamente en que la violencia, el odio y la discriminación no sean una realidad cotidiana. Es a partir de esta idea, que tomamos la historia de Ana Frank como la puerta a infinitos aprendizajes. De repente nos encontramos con el diario de una adolescente que, al igual que cualquier otra, pasó por esa instancia de la vida y vivenció lo que muchxs otrxs jóvenes pero, por otro lado, una adolescente que transcurrió esos años en una situación completamente atípica y límite, lo que la llevó a compartir reflexiones totalmente significativas que hablan sobre las guerras, la paz, la convivencia, entre otras. Ana es hoy la voz de una jóven que le habla a otrxs jóvenes, que lxs invita a empatizar pero sobre todo a ser conscientes de la trascendencia de su participación social. Ella encontró en la escritura una práctica para la libertad, ¿cuál es la nuestra?

Ana Frank Resistencia

La última dictadura cívico militar. 

Proponemos la posibilidad de establecer paralelismos entre ciertos mecanismos y procedimientos posibles de identificar tanto durante el nazismo como durante nuestra última dictadura. 

Muchxs se preguntan por qué abordamos esta temática. Muchxs se enojan porque abordamos esta temática. Muchxs se alegran porque abordamos esta temática… Puedo establecer una infinidad de razones, de puntos de conexión, de argumentaciones, de motivos, de discusiones, etc., pero propongo realizar algunas de esas puntuaciones.
A veces hablamos de las guerras mundiales viviéndolas completamente lejanas en tiempo y espacio hasta el punto de sentirlas ajenas. Es un desafío entender y pensar cómo es que son parte crucial de la historia de la humanidad y reflexionar sobre qué estaba puesto en juego y qué subyacía. Siempre va a ser “interesante” preguntarse sobre el rol de nuestro país antes, durante y después; no es eso lo que debería repercutir en ajenidad o cercanía pero muchas veces permite complejizar, discutir y establecer puentes. Sin embargo, esta es una reflexión personal, no es necesariamente el motivo que nos habilita a trabajar sobre este eje.
El museo cuenta con una sala titulada de la “Dictadura a la Democracia” porque para nosotrxs es trascendental pensar en el contexto local. Hablamos de nuestra propia historia y nos enmarcamos en una fuerte y particular tradición en la construcción de la memoria en nuestro país.
Entonces: introducimos el tema, establecemos paralelismos entre mecanismos y procedimientos que se dieron tanto durante el nazismo como durante nuestra última dictadura cívico-militar, hablamos de objetos que remiten a distintos aspectos en los que profundizar, hablamos de los “números de la dictadura” con un fuerte foco en la actualidad en materia de justicia y restitución y, fundamentalmente, hablamos sobre democracia, resabios de la dictadura en democracia, justicia y Derechos Humanos.

 

La actualidad: lxs jóvenes y sus derechos. 

Este es un eje presente a lo largo de todo el recorrido ya que en todo momento intenta hacerse foco en todas las temáticas que puedan interpelarnos en la actualidad. Incluso, el diario de Ana es el diario de una joven adolescente que vive en una época muy sórdida pero no deja de plantear reflexiones trascendentales y muy movilizantes para todxs. ¿Dónde está presente la actualidad?

  • En la escritura de una joven que vivió hace 85 años y que nos brinda una infinidad de pasajes que no pierden vigencia: Aparecen temas ligados con la guerra, la paz, la maldad, el amor, la esperanza, la convivencia, los deseos, los sueños, entre otros. Creo que hoy no podríamos hablar tampoco de juventudes despojadas de ellos…
  • Si vamos un poco más allá también podemos mencionar que tanto Ana como Otto, su padre, nos dejan un legado. Y de alguna manera, lo que hacemos es darle un valor a ese legado, apostar a su trascendencia y resignificación en el presente.
    Hay una invitación clara a asumir una responsabilidad sobre eso también, la construcción de memoria nunca es ajena a la dimensión del compromiso.
  • Cuando hablamos de nuestra última dictadura cívico-militar, y establecemos paralelismos entre mecanismos y procedimientos con el fin de permitir la construcción de marcos de referencia que permitan a lxs visitantes adoptar una mirada crítica, pensar desde la complejidad, desnaturalizar injusticias y ser partícipes activos/as/es en la construcción de la sociedad que queremos.

 

A lo largo de todo el recorrido, de nuestros talleres, de nuestras propuestas, de nuestras capacitaciones nos proponemos construir progresivamente una noción que nos parece fundamental y que esperamos que absolutamente todxs se lleven. Nuestro trabajo se ciñe, entre otras cosas, a construir herramientas que permitan identificar situaciones de violencia y discriminación e identificar los roles intervinientes para pensarnos en ellas y actuar. Nosotrxs hablamos todo el tiempo de estas situaciones y reconstruimos cómo sucedieron a escala mundial, internacional, nacional y local, pero vamos puntualizando y enfocando cada vez más en pequeñas situaciones que se dieron y que nos ayudan a reflexionar hoy sobre las que podemos presenciar en la cotidianidad. Asimismo, apostamos a reconocer los roles participantes que, a nuestro entender, son cuatro: una víctima, unx victimarix, unx observadorx pasivx y unx protectorx. No siempre están todxs presentes y no siempre son estáticos. De hecho, todo lo contrario: son roles dinámicos. Poder pensar en ello aporta toda la complejidad que buscamos que aparezca y es todo el mensaje que queremos que se lleven. Apostamos a que cada quien pueda constituirse en protectorx, eso seguro. Pero no sin antes dimensionar que nada es tan lineal y que apostar al cambio es posible.

Este es apenas un pequeño y breve desarrollo de algunos de los aportes que buscamos compartir a través del contenido específico que abordamos. Podríamos seguir profundizando largamente en ellos. Sin embargo, y más allá de las enseñanzas inherentes y el posicionamiento ético-político-pedagógico en el que se sostienen, me importa especialmente poder puntualizar desde qué perspectiva lo abordamos, cuáles son nuestros ejes teórico-metodológicos, cómo trabajamos.

Podemos preguntarnos de qué manera estamos eligiendo recordar o “¿qué memoria construimos?”. Si bien cada visitante trae consigo saberes previos y si bien cada guía carga en sí mismx un mensaje particular, una manera singular de entender, pensar y contar, la realidad es que desde el museo siempre nos dispusimos a pensar en estas preguntas e intentar darles alguna forma para contribuir a la transmisión. En esta línea, podemos traer a colación al menos dos cuestiones.


En primer lugar, consideramos que contar la historia de Ana y su familia, es una forma de humanizar y, humanizar, en este caso, es resistir. Para lxs nazis, sus víctimas eran números y, hoy, para la historia, esas víctimas también son números. Nosotrxs entendemos que detrás de cada uno de esos números, hay una persona. Una persona con intereses, deseos, sueños, miedos, alegrías, proyectos, amistades, etc. Poder contar la historia de al menos algunas de ellas es fundamental para humanizar esos números, para construir otra memoria posible y para reafirmar que el nazismo no ganó esta guerra. La invitación es que cada quien pueda involucrarse con otra historia, que sirva de motivación para lanzarse a conocer a otrxs,  que también merecen ser recordados y mantener su historia viva.

Y, en segundo lugar, se me hace fundamental mencionar que, en todo momento, nuestra propuesta busca focalizar en la dignidad humana y no recurrir al morbo como único canal posible hacia la sensibilización. Apelamos a que lxs visitantes se conmuevan, no a que se angustien. Lo que nos importa es habilitar reflexiones sensibles, críticas y agudas que conduzcan a la acción individual y colectiva. Creemos que no respetar la dignidad de las víctimas y apelar al golpe bajo es totalmente desmoralizante y contraproducente. En este sentido, lo que sí me gustaría aclarar es que no negamos ni ocultamos información. Que no haya imágenes de cuerpos en las fosas comunes ni ninguna de las cámaras de gas no deja de explicar las atrocidades vividas en los campos de concentración ni la extrema violencia, no significa que esa realidad no sea parte de la historia que hay que contar ni la memoria que apuesta al “Nunca Más”.

A partir de esto podemos decir que nos basamos en la “Educación de pares” como sostén transversal de la propuesta que desplegamos. Jóvenes hablándole a otrxs jóvenes, jóvenes formando a otrxs, jóvenes… todos los equipos del museo están compuestos por jóvenes a quienes se les va dando la oportunidad de crecer progresivamente, crecer para formar a otrxs, crecer para transmitir a otrxs, crecer para seguir educando. Estar para paliar las prácticas tradicionales, para romper con las miradas, discursos y prácticas adultocéntricas así como los estereotipos y prejuicios reinantes que menoscaban y deslegitiman a las juventudes… resistimos y lxs consideramos protagonistas.

Finalmente, y volviendo a lo antedicho, no podemos dejar de ponerle nombre a la premisa teórico-metodológica que sustenta el trabajo cotidiano: La Pedagogía de la Memoria y la Esperanza. Ya había adelantado que casi todo se trataba de esto y considero que así es. Hacemos memoria, respiramos memoria, construimos memoria… desde una mirada esperanzadora. Siempre. Antes mencioné concretamente que trabajamos desde la dignidad humana y qué significa eso, como también comenté que eso no implica retacear, ocultar o negar información. Trabajar desde una mirada esperanzadora tampoco. Nadie oculta o busca ocultar el horror humano y mucho menos pensando que trabajamos por un “Nunca Más” sólido, crítico y comprometido. Pero lo que sí hacemos es proponernos habilitar otros horizontes de pensamiento posible… Así comparto una anécdota y dos palabras para ilustrar.
Albert, amigo de Ana desde chiquito, sobrevivió. Cuando le preguntaron cómo lo había logrado, contó que tuvo que escaparse 16 veces. Nadie entendía cómo lo logró, así que lo compartió: más de la mitad de las veces que logró escaparse fue gracias a soldados nazis que le advirtieron a tiempo que tenía que irse. Acá está el dinamismo en los roles, la complejidad de la que tanto hablamos, así como la esperanza que tanto reivindicamos sin caer en una visión naif.

Casi llegando al final de la historia de lxs escondidxs (la familia Frank, la familia Van Pels y Fritz Pfeffer) hablamos de su derrotero: fueron descubiertxs, deportadxs y… ¿Las dos palabras? “Otto Sobrevive”

Centro Ana Frank Argentina. Guías del Museo en la entrada de la institución. 2024.
Centro Ana Frank Argentina. Guías del Museo en la entrada de la institución. 2024.

Como comenté en un principio este es un museo que considera que su fin último -o primero- es educar, no contar la historia como una manera más de acumular información.
Entonces el conflicto aparece cuando nos damos cuenta de que esto no es una linealidad, que está cargado de complejidades diarias que nos desafían y convocan a pensar y repensar nuestra tarea de manera cotidiana. Aparecen resistencias, malos entendidos, dejos de ignorancia, obstáculos administrativos y técnicos, entre otros. Pero, sobre todo, aparece una realidad acuciante, un contexto poderosamente inminente, un presente que avanza más rápido de lo que podemos elaborar… es por todo esto que nos proponemos seguir brindando algún marco de referencia posible para construir herramientas que nos permitan atravesar la cotidianeidad desde un lugar activo, de compromiso, de participación, de tracción y movilización hacia una sociedad más justa, más equitativa, más crítica y menos alérgica a la garantización de derechos para todxs.

Ilustración de Ana frank
Lic. Magalí Stemberg
Lic. Magalí Stemberg

Lic. y Prof. en Ciencias de la Educación (FFyL-UBA).
Esp. en Educación Sexual Integral (UNSAM) y Educación Popular (UNQ).
Técnica en Acompañamiento Psicoterapéutico.
Coordinadora del Museo – Centro Ana Frank Argentina.
Miembro de la Asociación Civil FORUM INFANCIAS (Comisión de Educación).